“Lo
cuentan las voces de los que se resisten”
LAS BASES MILITARES DE EE.UU. EN COLOMBIA
Y
SU RELACIÓN CON NUESTRO PETRÓLEO
“Con la presencia de bases de militares de
Estados Unidos en Colombia, el imperio norteamericano intenta controlar
las reservas de petróleo venezolano”.
Vladimir
Adrianza S.
19 de Agosto de 2009.
Con la
presencia de Bases de EE.UU. en Colombia, se ha puesto de nuevo sobre el
tapete, cuales son las verdaderas razones que se encuentran detrás de esta
acción.
Muchas personas en Venezuela y en nuestra región, han acertado en señalar que el interés real de estas acciones obedece a la intensión de controlar:
Muchas personas en Venezuela y en nuestra región, han acertado en señalar que el interés real de estas acciones obedece a la intensión de controlar:
- Las inmensas reservas de petróleo existente en Venezuela.
- La abundante biodiversidad existente en la Selva Amazónica.
- Las grandiosas reservas de agua dulce de América del Sur y en especial, el llamado Acuífero Guaraní.
En el presente trabajo, nos enfocaremos en la
primera razón señalada, las reservas de petróleo venezolanas. Durante todo el
siglo XX, EE.UU. a través de sus empresas transnacionales, controló la
producción petrolera en Venezuela. Empresas como la Standard Oíl (CREOLE) de
los Rockefeller, fueron las encargadas de administrar tan importante recurso
durante décadas, inclusive, luego de la nacionalización petrolera de 1975,
proceso en el que quedaron a cargo del mercadeo del petróleo y sus derivados,
así como, del suministro de todo tipo de instrumento tecnológico requerido para
la industria "nacionalizada".
EE.UU. es el mayor consumidor de petróleo del
mundo, pero para su pesar, actualmente solo posee reservas probadas del orden
de los 20 Mil Millones de Barriles (MMMb), que al compararlas con su consumo de
aproximadamente 19 Millones de Barriles diarios (MMbd), implican, que si ese
país solo consumiera sus propias reservas, tendría petróleo para
aproximadamente tres (3) años. El impacto que esto representa en la economía y
funcionamiento de los EE.UU. es lo que los ha llevado a intentar controlar,
este recurso alrededor del mundo.
Según la OPEP, América del Norte, es decir, EE.UU.,
Canadá y México, consumen en conjunto 24 Millones de Barriles Diarios (MMbd) y
producen entre todos aproximadamente 10,7 MMbd. La contribución de esos países
al petróleo consumido por EE.UU. es sumamente pequeña comparada con la cantidad
de Petróleo que consume a diario esa nación, cuya matriz energética depende en
aproximadamente en un 60% del consumo de petróleo. EE.UU actualmente importa 6
de cada 10 barriles y muchos de estos vienen de nuestro país y del Medio
Oriente.
Aunque Canadá posee inmensas reservas de bitumen en
las llamadas "Arenas bituminosas de Alberta", las que ascienden a 315
Mil millones de barriles (MMbd), su explotación es muy costosa y el impacto
ecológico es muy grande. Una situación similar sucede con el Petróleo existen
en el territorio de Alaska / EE.UU.
En cuanto a México, el Presidente Felipe Calderón
mencionaba a inicios de la semana (17/08/2009) en su visita a Brasil, que la
producción Mexicana ha declinado unos 700 mil barriles diarios (mbd) en los
últimos diez (10) años, situándose dicha producción en aproximadamente 2.5
MMbd. La diferencia entre producción y consumo interno en México es del orden
de los 500 Mil Barriles Diarios (mbd), que se exportan totalmente a EE.UU.
Algunos expertos han dicho que las reservas de ese país (México) permitirán su
explotación a lo sumo, 30 años más.
Como hemos podido observar, la contribución de los
países de América del Norte al petróleo consumido por EE.UU. es sumamente pequeña comparada con la cantidad de Petróleo
que consume a diario esta nación, cuya matriz energética depende
aproximadamente en un 60% del consumo de petróleo. EE.UU actualmente importa 6 de cada 10 barriles que
consume, muchos de estos vienen de nuestro país y del Medio Oriente (y en
especial, de Arabia Saudí). Pero a diferencia de lo dicho por los países del
Medio Oriente, nuestras reservas no están infladas y están sometidas
actualmente a un proceso de certificación con el llamado Proyecto "Orinoco
Magna Reserva".
Venezuela exporta a EE.UU. aproximadamente 1.6
millones de barriles diarios (MMbd), más o menos la mitad de nuestra producción
petrolera actual y nuestros embarques llegan en solo cinco (5) días a sus
costas. Arabia Saudí y otros países del Medio Oriente, exportan cantidades
superiores a las nuestras pero estos llegan luego de cuarenta y cinco (45) días
de travesía por el Atlántico, sujeto a todo tipo de vicisitudes en el trayecto.
A excepción de lo ocurrido con el sabotaje petrolero
de 2002 y 2003, promovido por cierto por EE.UU., Venezuela nunca ha dejado de
cumplir con sus exportaciones a esa nación; pero al gobierno de los
EE.UU. y a la oligarquía económica y militar de ese país, le molesta que
Venezuela esté exportando petróleo a otras regiones del mundo como por ejemplo
a China, país que se perfila como la primera potencia emergente del siglo XXI.
Estas exportaciones nos permiten diversificar nuestros mercados y disminuir la
dependencia económica de la nación norteamericana, lo cual no les interesa a
estos últimos.
EE.UU. ha impulsado o participado en
guerras alrededor del mundo, con el propósito de garantizarse el suministro de
materias primas de todo tipo y en especial del petróleo. En estas acciones no
solo ha participado su gobierno sino diversos sectores influyentes de esa
sociedad. Es altamente conocida la participación de la familia Rockefeller
en guerras como la del Chaco, entre Bolivia y Paraguay sucedida durante los
años 1932 y 1935 e inclusive, en la planificación de la primera y segunda
guerra mundial, que llevó a los EE.UU. a constituirse en la primera potencia
del planeta.
Durante todo el siglo XX, el gobierno
de los EE.UU. apoyó en Venezuela regímenes como la dictadura del Gral. Juan
Vicente Gómez, participó en los derrocamientos de los Presidentes Isaías Medina
Angarita, Rómulo Gallegos y en el asesinato de Carlos Delgado Chalbaud. Apoyó a
gobiernos genocidas como el de Marcos Pérez Jiménez, Rómulo Betancourt, Raúl
Leoni y Carlos Andrés Pérez, insertando a connotados terroristas como Luis
Posada Carriles y Orlando Bosch (todos ellos miembros de la CIA) en los
cuerpos de seguridad del Estado Venezolano y todo para qué; principalmente para
garantizarse el suministro petrolero venezolano.
Recientemente, EE.UU. mediante
organismos como la National Endowment for Democracy (NED), la Agencia de los
Estados Unidos para el Desarrollo Internacional (USAID) y otros, ha financiado
a diversos sectores de la oposición venezolana con la esperanza de derrocar al
Presidente Hugo Chávez, acabar con el Proceso Bolivariano y derogar la
Constitución Nacional vigente desde 1999, lo que le facilitaría tomar control
de la producción de petróleo en Venezuela y de los importantes yacimientos de
gas que nuestro país posee. Pero, como tales acciones han fallado a lo largo de
los últimos diez (10) años, ahora trata de tomar posición desde Colombia, para
facilitar una agresión a nuestro territorio. La aplicación del llamado Plan
Colombia está altamente relacionada con la afirmación del Senador de EE.UU. Paul
Coverdell quién en vida afirmó: ¡ Para controlar a Venezuela es necesario
ocupar militarmente a Colombia !. Y no solo contra nosotros, también
contra otros países de Sur América, que poseen recursos naturales que son del interés
para esa nación.
Venezuela dispone de la reserva petrolera
más grande que país alguno posea en el mundo, estimándose que regiones como la
llamada "Faja del Orinoco", posee una cantidad recuperable de
petróleos pesados y extra pesados que asciende a 235 Mil Millones de Barriles
(MMMb), a un factor de recobro del 20%. Esta cifra podría ser superior si los
nuevos adelantos tecnológicos permitieran factores superiores al antes
descrito. Para que no quede duda de su importancia, empresas de más de veinte
(20) países incluyendo a EE.UU., se encuentran actualmente presentes en
asociación con Venezuela, para la explotación de los recursos de la Faja del
Orinoco y en especial, Japón, China y Rusia, quienes acaban de anunciar
inversiones del orden de los 44 Mil Millones de Dólares. En un mundo en que las
reservas de petróleo han empezado a declinar, Venezuela constituye una gran
esperanza de suministro energético para muchos países que no poseen tal recurso
y en especial en nuestra región (Sur América y el Caribe), mismo que EE.UU.
pretende mantener solo bajo su control y uso.
Todos los venezolanos sin excepción,
debemos constituirnos en un solo bloque para defender lo que por derecho y
legado de nuestros libertadores, nos pertenece, dejando de lado divisiones que
solo favorecen al Imperio.
Como dijo
el Ché…
¡El presente
es de lucha, el futuro nos pertenece!
¡Venceremos!
“Por una conciencia Socialista, dejémonos de guardar ese
silencio estúpido”
No hay comentarios:
Publicar un comentario