DOS
FAROS
(Tan
cercas de mí y tan lejos de mis antojos)
Dos torres que confluyen en un solo punto
Parecen orientar mis sentimientos
perdidos
Que en larga noche de lisonjera agonía
No ocultan sus gustos por las señales que emiten
Ellas presagian el fin de la congoja
Y un nuevo tormento
parece que vendrá
¿No fue acaso Augusto Emperador de Roma?
¿No puedo entonces mi destino gobernar?
¿Por qué se empeñan en dislocar mis pensamientos?
¡Prole ingrata!, cual Poseidón rompen mis remos
Y en mar bravío naufragan mis sentimientos,
Pero tanta agua no puede nunca mis penas ahogar
Son ellas, las que me inducen a vivir
Parecen manantiales en paraíso o edén
Y yo, cual gaviota en vuelo dominguero
Pesco mocedades
Rómulo E. Pérez F.
20/08/2018